lunes 04 de enero 2021

De estrellas y caminos

Edna Iturralde

Dicen los científicos que la estrella que siguieron los Reyes Magos era una nova que explotó. Yo creo que fue la estrella que señaló el nacimiento de Jesús. De todas maneras, el cúmulo de estrellas en el firmamento va cambiando de posición a medida que la Tierra gira alrededor del Sol. Solamente hay una estrella fija que jamás cambia de lugar: la estrella Polar, en el hemisferio Norte. Esta estrella ha servido de guía a todos los navegantes y viajeros que se han aventurado por los océanos y caminos, (tras constelaciones tienen ese propósito en el hemisferio Sur, pero dependiendo
de la época del año). Así mismo, Jesús es nuestra estrella que ilumina directamente nuestras almas. Ahora comenzamos un nuevo año. Hemos visto
que muchos de nosotros, debido a nuestra fe, sobrevivimos a la difícil situación de la pandemia del año anterior. Yo les invito a mirar una estrella que jamás cambiará de lugar ni los dejará perderse, una estrella que es luz de amor, que nos da libre albedrío de seguir el camino, detenernos o, incluso, perdernos. Somos libres. Todo depende de lo que escojamos.
¡Feliz Año Nuevo!