La aventura se vive mejor en compañía

Encontrar actividades diferentes puede ayudar a encender la chispa del amor. Hay varias alternativas divertidas.
La caída de halcón es un salto libre  de 30 metros, sostenidos por arneses, para disfrutar la vista. Foto: Vicente Costales / FAMILIA

La caída de halcón es un salto libre de 30 metros, sostenidos por arneses, para disfrutar la vista. Foto: Vicente Costales / FAMILIA

12 de febrero de 2020 16:24
Nancy Verdezoto

Estar en una relación no debe ser monotonía, rutina ni costumbre. Compartir la vida con alguien más puede ser muy divertido y emocionante, solo se deben buscar alternativas que puedan disfrutar entre los dos.

Realizar un viaje juntos puede ser el primer paso. Eso ayudará a que se conozca a la pareja desde otra perspectiva, más íntima. Para los más aventureros, la alternativa puede ser ir de camping.

“Se puede hacer una acampada diferente y disfrutar de actividades extremas juntos. Pero también se puede dormir en una casita de árbol. Este es un plan que combina lo romántico con la aventura”, explicó Andrés Merino, de Nayón Xtreme Valley, ubicado en San Pedro del Valle (Parroquia de Nayón).

Además, se puede celebrar San Valentín con actividades más llamativas como el canopy o caminar sobre un puente a 300 metros de altura. Estas son algunas de las opciones que las parejas más arriesgadas disfrutan.

Según Merino, muchas parejas buscan realizar actividades diferentes. Estas ayudan a fortalecer la relación y a relajarse con seguridad y sin tener que movilizarse lejos de la ciudad.

La idea de compartir la adrenalina del momento puede ser muy llamativa y puede generar experiencias y recuerdos conjuntos, que luego podrán compartir.

Para muchas personas, la energía de correr riesgos puede despertar la chispa de la pasión y revivir una relación de pareja, porque le da un nuevo impulso para realizar actividades novedosas y divertidas.

Vivir nuevas aventuras o experiencias puede ayudar a descubrir nuevas facetas de su pareja. Quizás pueda vencer su miedo a las alturas, o se anime a realizar una actividad que nunca antes pensó en hacer.

Estas memorias permitirán que conforme avance la relación ambos puedan establecer nuevas prioridades, cumplir sus metas y establecer desafíos que los mantendrán en constante desarrollo.

En la casa del árbol se puede pasar la noche. Es una cabaña cómoda en lo alto de un árbol. Foto: Vicente Costales / FAMILIA

En la casa del árbol se puede pasar la noche. Es una cabaña cómoda en lo alto de un árbol. Foto: Vicente Costales / FAMILIA


Lo importante es encontrar actividades que puedan realizar juntos. Buscar las opciones y decidir si existe algún límite de lo que pueden hacer, para no obligar al otro a realizar cosas que no le gusten o con las que no se sienta cómodo.

Por ejemplo, si tiene temor a lanzarse de un puente, no se puede presionar a la pareja para que salte. Hacerlo podría provocar la reacción contraria a la deseada y genera un conflicto entre los dos.

Si la adrenalina no es lo suyo, se pueden buscar alternativas divertidas y que despierten esa sensación de novedad, que ayude a la pareja a arriesgarse a hacer cosas nuevas.

Una alternativa es realizar trekking. Ir a una montaña cerca que no conozcan puede ser una buena opción para empezar. Llegar a la cima los hará sentirse más conectados, porque lo habrán hecho como un equipo, superando todos los obstáculos del camino.

También se pueden realizar carreras de trail, que les permitirá además entrenarse juntos y prepararse para realizar una competencia de aventura. Si ambos son competitivos, esto les motivará a esforzarse más y a incentivar a su compañero para llegar juntos a la meta.

La aventura es necesaria en una relación. Romper la rutina es importante, porque ayuda a encontrar nuevos puntos de conexión entre las dos personas. Arriésguese a practicar actividades distintas, dedíquele un día o un fin de semana al mes a disfrutar con su amor. 

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