Además de una buena comunicación, amor, respeto y confianza, parece ser que hay otro ingrediente que ayuda a las relaciones de pareja a tener éxito. Un estudio realizado por la firma Rover buscó analizar cómo influenciaba la presencia de un perro en la convivencia.

El 64% de las parejas dijeron que su relación se vio fortalecida gracias a estos animales. Más allá de una cifra, los investigadores querían conocer por qué la presencia de un can podría tener un impacto positivo en las relaciones. Ellos identificaron que gracias a los perros, las personas podían descubrir ciertas características de sus parejas que serán importantes en el futuro.

Una de las principales es el compromiso. Tener un perro requiere de un gran sentido de responsabilidad. Estos animales dependerán de una persona, una pareja o una familia por, al menos 10 años. Esto, según los investigadores, es una muestra de que la pareja ve la relación como algo duradero y estable. También que está dispuesto o dispuesta a evolucionar y crecer en conjunto.

Hay otras ventajas de tener una mascota en pareja. El trabajo en equipo es necesario para que la relación funcione. Al cuidar de un animal de compañía, es importante que ambas partes puedan hacerse responsables del perro, cuidarlo, pasearlo, alimentarlo y educarlo. Esto además evidenciará algunas características de la otra persona en un rol paternal o maternal.

Por otro lado, al tener una mascota será necesario que la pareja llegue a ciertos acuerdos y consensos. ¿Qué tipo de perro se va a adoptar?, ¿cómo se organizará la casa de ahora en adelante? y ¿cómo se dividirán las tareas de su cuidado? son algunas cuestiones que se deben resolver antes de la llegada de este nuevo miembro de la familia.

Sin embargo, tener una mascota tampoco debe entenderse como una forma de probar la relación. Los especialistas de Rover recomiendan evitar tener una mascota si la pareja tiene problemas.

Además, en caso de una separación, se debe pensar en el bienestar del animal y buscar las mejores opciones para su futuro. Aunque en la legislación actual los animales se consideran bienes, algunas parejas deciden establecer acuerdos de custodia para su cuidado.