¿Qué dice la ciencia sobre la infidelidad?

Algunos estudios han hallado información interesante sobre el comportamiento de hombres y mujeres en sus relaciones de pareja
La infidelidad es común entre las parejas y ha ido en aumento

La infidelidad es común entre las parejas y ha ido en aumento.

2 de julio de 2020 13:31
Gabriela Castellanos

El amor ha sido objeto de cientos de estudios científicos que se han interesado en conocer cómo funciona, por qué ocurre y cuál es su papel evolutivo. También han buscado ahondar más sobre todo lo que tiene que ver con las relaciones, incluida la infidelidad.

Lo primero que se debe entender es que la infidelidad no se entiende de igual forma por hombres y mujeres, de hecho puede ser un concepto distinto para cada persona. Una investigación en la Universidad de Kansas demostró que los hombres perciben la infidelidad como un acto sexual, mientras que las mujeres la entienden como la consecuencia de un deseo emocional.

90% de las mujeres consideró que besarse con otra persona es infidelidad, pero solo el 75% de los participantes masculinos estuvieron de acuerdo. Además, 51% de los hombres y 68% de mujeres consideró que enviar mensajes de texto subidos de tono era infidelidad.

Una de las preguntas que se hacen las personas es por qué se da la infidelidad en las relaciones de pareja. Un estudio con casi 75 000 personas encontró que el 45% de mujeres fueron infieles porque sintieron una atracción por otra persona. El 32% dijo que quería sentirse más deseada.

En el caso de los hombres, la infidelidad podría tener más relación al sexo. Un 48% dijo que quería tener más relaciones sexuales y el 46% dijo que buscaba más variedad tanto en sus parejas como en sus experiencias. En la Universidad de Florida, un estudio relacionó el narcisismo con la infidelidad en las primeras etapas de la convivencia de las parejas casadas.

Hay quienes aseguran que la infidelidad está también en los genes. Los investigadores encontraron que esto podría tener algo de cierto ya que la conducta de ser infiel puede vincularse directamente a las rutas o sistemas de recompensa del cerebro. En este proceso está involucrado un gen variable. Según el estudio, la selección natural elige una de las dos variables y esto afecta directamente la forma de relacionarse con el sexo opuesto.

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