La pandemia de covid-19 que encerró al mundo en 2020 alejó a todas las personas de sus actividades cotidianas, los pacientes oncológicos no fueron la excepción. En Ecuador los hospitales no cerraron la atención a personas diagnosticadas con cáncer; sin embargo, la medicina fue escasa y el temor al contagio frenó la asistencia los centros médico.

Jhonathan Ortega, especialista en Administración de Salud Farmacéutica, responde algunas interrogantes sobre el tema.

Jhonathan Ortega comenta que el reto más importante en Ecuador es contar con diagnósticos y medicina eficaz.

¿Cómo afectó el covid-19 a los pacientes oncológicos?
La pandemia de covid afectó de una forma directa e indirecta. La directa fue a los pacientes que ya estaban diagnosticados, es decir, estas personas ya sabían y tenían una constancia del diagnóstico. También, ya se encontraban en su etapa de exámenes e inicio del tratamiento y los de forma indirecta solo tenían la sospecha y no tuvieron un proceso médico.

En pandemia se cerró todo, pero la atención a estos pacientes no paró. En los hospitales el personal médico fue distribuido para las áreas covid. El miedo a contagiarse y las bajas defensas de estas personas los alejaron de los tratamientos.

¿Qué genera suspender temporal los tratamientos radio y quimioterapia?
La progresión del cáncer. Lo que hace el tratamiento de alguna forma es frenar el crecimiento del tumor. La radio y quimioterapia son los mecanismos generales para tratar el padecimiento y dar una mejor calidad de vida a las personas.

Al frenar la contención el tumor sigue expandiéndose por el cuerpo. Si bien es cierto no todos los hospitales cerraron, pero algunos de ellos no tenían la medicina necesaria para el cáncer, por eso algunos pacientes salieron a la calle a reclamar sobre la falta insumos, esto fue parte del manejo de la pandemia.

En Ecuador ¿existió un aumento de casos oncológicos durante la pandemia?
Antes del covid los pacientes ya tenían un mayor acceso a la salud oncológica; sin embargo, los casos durante los últimos años no han aumentado. Antes no se sabía sobre algunos tipos de cáncer, actualmente hay más estudios que permiten tratarlos más y tener un mejor diagnóstico.

Un posible aumento se da por los casos represados, es decir, aquellos de los que se tenía una sospecha y no fueron tratados a tiempo. Los pacientes sospechosos tienen una evolución más grave de la enfermedad. Estos hubiesen sido tratados si no se hubiera dado la pandemia.

¿Qué causó los contagios de covid-19 en estos pacientes?
Un paciente oncológico es más frágil y por la fuerza de la enfermedad el tratamiento es bastante agresivo y deteriora el sistema inmunológico es más vulnerable que en una persona sana. Ellos se encontraban dentro del grupo prioritario en vacunas, cuidado y prevención. Algunos que se contagiaron probablemente fallecieron por la complicación de las dos enfermedades.

¿La salud mental de los pacientes ha sido tratada durante la emergencia sanitaria?
La depresión fue el padecimiento principal. Se debe considerar que los pacientes están con un diagnóstico fuerte y a eso se suma el encierro. La salud mental se complicó por el estrés al no poder ir al hospital por el tratamiento, al luchar por la vida. La frustración, la ansiedad y los cambios de humor estuvieron latentes.

El manejo y la ayuda ante la frustración llegó desde los familiares. Algunos pacientes no tuvieron la posibilidad de contar con un acompañamiento psicológico. En este caso el paciente hablaba o se desahogaba con las personas de su entorno. La salud mental sigue siendo un tema de cuidado y prevención.

¿Cuáles son los retos que deben afrontar los pacientes y médicos tratantes del cáncer con la nueva normalidad?
Un mayor acceso a medicamentos, diagnósticos más oportunos sobre los tipos de cáncer y eso se relaciona con la atención que puedan recibir y en la capacidad de los hospitales para recibir a los pacientes.

El manejo de las casas de salud debe ser desde la economía para la adquisición de insumos. La preparación médica va de la mano, en el país no hay una especialización en oncología y algunos profesionales han acudido a otros lugares a estudiarla. F