La rinitis es la inflamación de la mucosa nasal, se caracteriza por la abundante secreción (moco) que produce la congestión en la cavidad, además, se genera la picazón en la nariz y constantes estornudos.

Marco Flores otorrinolaringólogo menciona que la rinitis alérgica es genética, la disposición se hereda de padres a hijos, esta puede aumentar o disminuir la intensidad. Existe otro tipo de rinitis que es la ocupacional esta se contrae por la exposición a ambientes que tengan una alta cantidad de alérgenos.

Los principales síntomas de la rinitis son la irritación de los ojos, la congestión nasal por la inflamación de los cornetes y la acumulación de la mucosa, picazón de la nariz, gotero retronasal la sensación de flema que baja desde la nariz a la garganta, respiración bucal, ronquido, picazón en los oídos.

Cuando el proceso alérgico ha avanzado se puede producir infecciones como: sinusitis, faringitis, neumonía, entre otras. Estas deben ser tratadas con medicamentos suaves y moderados dependiendo la complejidad de la infección.

El tratamiento empieza con: lavados nasales simples con sueros fisiológicos, espray, gotas, soluciones salinas hipertónicas o isotónicas, estos ayudan a limpiar la mucosa de la nariz. Cuando el proceso alérgico ya es avanzado el especialista recetará medicamentos antihistamínicos, estos ayudan a reducir los síntomas de alergia, la loratadina es el más conocido. Además, es recomendable evitar los factores que causan la rinitis en las personas.

Los factores alérgenos más comunes son: los ácaros estos son la causa principal de la rinitis, estos se acumulan en cortinas, alfombras, cobijas, es necesario tener un constante aseo dentro del hogar. El pelo y piel de los animales, este factor está presente en el aire, produce picazón y constantes estornudos. La humedad y el moho de las paredes por los hongos que producen, las personas tienden a contraer más rápido un cuadro alérgico. El polen de las plantas es más común en países que tienen las cuatro estaciones.

La rinitis alérgica puede ser diagnosticada desde los primeros meses de vida con las pruebas de alérgenos. Los expertos recomiendan que cuando se empiece a tener síntomas acuda al alergólogo para determinar el factor que le produce la crisis alérgica.