Solamente una persona demasiado ensimismada y aislada sería incapaz de reconocer el rostro del actor estadounidense Will Smith. No cualquiera ha sido protagonista de cinco filmes que han recaudado más de USD 500 millones cada una. Sus cifras en la taquilla permiten a Forbes considerarlo el actor más financiable del mundo, a pesar de que existe uno que otro traspié, como la película ‘After Earth’, del 2013, que apenas recaudó la mitad del costo de producción.

Con más de 47 actuaciones en diferentes producciones cinematográficas y de televisión, Anne Hathaway, de 36 años, ha ganado 64 premios -incluyendo un Oscar por su papel en ‘Los Miserables’.

En algunos casos, el cine de ficción rebasa la noción de entretenimiento para convertirse también en un documento histórico y en un ejercicio de la memoria. Ese es el caso de ‘La lista de Schindler’, estrenada en 1993 como una película de época que recrea parte de los horrores que se vivieron durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).

Glenn Close tiene 71 años y una carrera brillante en la actuación, tan contundente como la de Meryl Streep. Pero, a diferencia de esta última actriz que ya no tiene espacio en la repisa para sus trofeos, Close jamás ha podido llevarse un premio Oscar a casa. Este año ha vuelto a ser nominada y el consenso general es que ya es hora de que se lo den.

Jennifer López vuelve este año a la pantalla grande con la película ‘Second Act’ (Jefa por Accidente). Esta comedia romántica marca el regreso de la actriz y cantante de ascendencia puertorriqueña, tras tres años de ausencia en el cine.

Por 54 años nadie se imaginó a ninguna otra persona además de Julie Andrews como Mary Poppins. El emblemático papel de la niñera le permitió ganar su primer Oscar a la Mejor actriz en 1964.

El cuento de hadas del escritor Ernst T. A. Hoffman ‘El cascanueces’, que luego fue inmortalizado en un ballet con música del compositor ruso Piotr Ilich Chaikovski, fue adaptado para el cine una decena de veces.

Lady Gaga es una diva del pop y su nombre es sinónimo de excentricidades y extravagancia. La combinación de sus vestuarios, sus canciones y la calidad de sus presentaciones en vivo la han colocado en un lugar determinante del mundo del espectáculo.

El nombre de Rowan Atkinson no resulta muy familiar, pero los de sus personajes ‘Mr. Bean’ y ‘Johnny English’ han transcendido las fronteras y las épocas.