Más allá de los videos de bailes, de bromas o del día a día de ‘influencers’, TikTok tiene espacio para una tendencia que va ganando fuerza. La plataforma es ahora una potente herramienta educativa. Un estudio de Marketing Science para TikTok España lo confirma.

Los resultados que obtuvieron en este estudio apuntan a que el 94% de los usuarios (entrevistados) afirma haber usado la aplicación para aprender. El ‘hashtag’ específico para este ámbito #AprendeConTikTok es uno de los más utilizados, con 15 000 millones de visualizaciones mundiales.

Existe incluso una investigación que se realizó con estudiantes ecuatorianos que pone en evidencia el interés por consumir contenidos educativos en esta red social. En el estudio ‘TikTok como herramienta educomunicacional en los estudiantes de bachillerato del cantón Latacunga’ (de Mario Banda y Ronald Zabala),
57% de los participantes indicó que emplean la plataforma como apoyo en el proceso
de aprendizaje.

En esta investigación participaron 165 estudiantes, de entre 14 y 17 años, de dos planteles educativos del cantón Latacunga. La idea de llevarlo a cabo surgió en el contexto de la virtualidad dada por la pandemia. Mario Banda, docente de la Universidad Técnica de Cotopaxi, especializado en Planeamiento y Administración Educativos, dice que se enfocaron en TikTok porque “es una herramienta que surge de manera efervescente, de manera importante dentro de las redes sociales”.

Banda asegura que detectaron que hay aceptación entre la comunidad de estudiantes para usar la red social más allá del entretenimiento y la distracción. Que los jóvenes, en efecto, lo usan como una fuente para conseguir ‘tips’ educativos.

En la plataforma, los usuarios que se dedican a crear y compartir contenido de este tipo, también son cada vez más numerosos. Hay cuentas para aprender sobre geografía, gramática, ciencia, inglés, entre otros. Hay instructores veinteañeros y que pasan del medio siglo, como el español Carlos Maxi, que a sus 70 años enseña matemáticas a través de la ‘app’.

Profes e ‘influencers’

En Ecuador, asimismo, hay creadores de contenido educativo con un amplio rango de seguidores. El más conocido es ‘elingefrancisco’ que tiene casi 2 millones de seguidores en TikTok. Detrás de esta cuenta está Francisco Terán, ingeniero en Sistemas y docente que enseña trucos sobre el manejo del programa Excel.

Como él hay otros profesores en el mundo real que se valen de la plataforma para compartir conocimientos. Algunos de los más populares enseñan inglés de una forma fácil y rápida.

Hace un año y siete meses, Javier Mafla se abrió una cuenta en TikTok y empezó a compartir, en sus palabras, videos de cualquier cosa. Llevaba tiempo difundiendo su método para aprender inglés en su canal de YouTube y quiso moverse a otra plataforma.
Hace unas semanas alcanzó el millón de seguidores y ninguno de los ‘clips’ que publica en su perfil baja de las 10 000 vistas. Es el resultado de su constancia y de mucha estrategia. El objetivo de su perfil es dar a conocer la forma en la que él enseña inglés.

Un método que, asegura, es diferente a los habituales y que es la base de la academia de inglés que creó tras graduarse de la carrera de Negocios Internacionales. Javier explica que, con el paso de los meses, ha ido perfeccionado su perfil. Se organiza haciendo listas con los contenidos para publicar. Cada vez gana más destreza.

Antes se demoraba unos 40 minutos en grabar, editar y subir un video, ahora lo hace en 10. Tener presencia en esta red social, considera, es una forma de ayudar y llegar a muchas personas.

Johana Cortaza, ‘valeristeaching’ en TikTok, es otra ‘influencer’ ecuatoriana que se dedica a compartir contenido educativo. Fuera del ámbito virtual, la joven de 23 años es profesora de inglés de niños. Se acaba de graduar de la carrera de Ciencias de la Educación - Mención en Inglés.

Creó su perfil en la ‘app’ a raíz de la pandemia, en agosto de 2020 y en casi dos años ya acumula cerca de 260 000 seguidores. Se lanzó al ‘estrellato’ cuando hizo un dueto con otra cuenta que enseña inglés a la que seguía. En ese momento empezaron a aumentar sus seguidores. Johanna confiesa que pensó: “Esto sería una buena manera de ayudar a las personas y de compartir los conocimientos que tengo
en esta área”.