Luego de casi tres años ausente de los escenarios nacionales, la cantante Karina vuelve a Ecuador con la gira Me quiero. Este ícono de los años 80 sigue atrayendo a sus fanáticos y también conquista a las nuevas generaciones.

¿Qué encuentras en Ecuador que te hace volver?
Hay un público cautivo que me adoptó hace años, al que le debo lealtad. Ecuador es como casa. Junto con México y Venezuela es un mercado importante.

¿Qué encuentran en tu música las generaciones que siguen coreando temas como Sé cómo duele’, Sálvame y otros?
La generación en la que somos protagonistas, (los 80 y principios de los 90) evoca recuerdos muy felices. Así como nosotros heredamos la música de nuestros antecesores, hoy nosotros somos los antecesores. La música que hace historia nunca deja de estar ahí.

¿Cómo es la música que llegó al corazón de tus fans?
Siempre he cantado al amor y creo que es una música que conecta mucho con el dolor, con el drama. Soy una persona muy dramática en mi vida personal, entonces
la forma de interpretar conecta, porque es el despecho total, es el amor y el desamor cantado a ese estilo. Cuando uno se destruye totalmente, no tiene barreras para expresar ese amor.

¿Hay quienes señalan que lo ocurrido en épocas pasadas fue mejor, te sumas a esa corriente?
No creo que sea mejor. Es propio; es decir, nosotros creemos que es mejor porque es lo nuestro.

¿Tus letras se inspiraron en las relaciones afectivas de los 80, ha cambiado la concepción de amor desde entonces?
Lo que ha cambiado es la expresión. En mi época era todo más inocente. El amor no cambia, el dolor no cambia. El día que te dejan o el día que tú dejas de alguien es muy doloroso, no importa cuándo.

Dicen en las redes que canciones como las tuyas, las de Franco de Vita o Montaner eran música de verdad, ¿qué opinas?
Toda la música es de verdad. No creo que haya música de mentira (risas). Lo que pasa es que nosotros somos de esa época y anhelamos esas letras, esa poesía. Hoy todo es un poquito más rudo, crudo, vulgar, y no estamos acostumbrados a esos códigos, pero es la música que conecta con una generación diferente. Aunque ese movimiento urbano, etc., siento que se acerca también a nosotros un poco porque si no, no tendría el éxito que tienen Camilo o Sebastián Yatra. Ya están empezando primero a cantar melodías y segundo a escribir cosas bonitas, entonces quiere decir que ya hay una necesidad de volver un poco a esta raíz, a la poesía. Ya cansó un poquito el tómalo, mételo, sácalo. Ya está un poquito cansoncito, la verdad que sí.

¿Tus ‘lives’ en redes gustan mucho, a qué atribuyes el mantener la conexión con tus fans?
A mí (risas). Uno se tiene que montar en el tren de lo que está pasando porque si no, te vas extinguiendo y yo no me quiero extinguir, no estoy lista para morir musicalmente. Tengo aún mucho que aportar. Estoy productiva y activa. La edad es solo una palabra.

Entonces, ¿crees que las redes son aliadas de los artistas?
Tú haces de las redes lo que tú quieras hacer de ellas. Para unos es un caldo de cultivo de puro chisme y de cosas negativas, para otros es una ventana para vender, vender, vender. Cada quien hace lo que quiere. Nosotros teníamos una disquera, una radio, un canal de televisión, ahora tenemos miles de opciones. Lo cual también es negativo porque hay también el idiota que anda suelto y no tiene ningún tipo de limitación y también obtenemos de eso, pero uno debe tener un poquito de criterio

Participaste en novelas como ‘Pecado de amor’, ¿te gustaría regresar a la actuación?
Me gustaría hacer series. No me he ocupado de eso aún porque cantar me lleva tiempo y también quiero tener una vida, pero está en mi ‘bucket list’.

La canción 'Me quiero', que da nombre a tu gira y habla del amor propio, ¿por qué es importante hablar de eso ahora?
Todo tiene un ciclo que vuelve al origen y el amor propio es del origen de todos los amores. Siento que me he querido muy poco porque he tenido que combatir cosas con las que crecí, muchos complejitos, etc.; y, poco a poco, he ido descubriéndome a mí misma como mujer y como individuo.

¿Has dicho que la adversidad es una aliada, por qué?
​Yo nací en adversidad, es una constante en mi vida. Nada es fácil para mí, entonces ya yo le di entrada en mi vida. Le dije está bien, si a ti te gusta, si tú quieres ser mi amiga, vamos a ser amigas. Nada es fácil, si yo tengo que ir de A a B, en el transcurso me voy encontrar a T, Z, K, o sea, nunca e fluido como pareciera. Entonces yo he hecho de la adversidad un motor. Le di la vuelta y pude conquistar la adversidad. Primero, no me amargo, ya no resisto la adversidad, la recibo y la entiendo y le digo, vamos a negociar.