EL ‘cónsul’ de Ecuador que nació en Argentina

Falso Nueve es un influencer que habla de fútbol y el Ecuador. Nuestro país le gustó tanto que lo visitó en noviembre de 2021. Le faltó tiempo y quiere volver por más.
Permaneció 15 días en nuestro país. Dice que le falta conocer Cuenca, Baños de Agua Santa y Loja en una próxima vez. Foto: Enrique Pesantes / Familia

Permaneció 15 días en nuestro país. Dice que le falta conocer Cuenca, Baños de Agua Santa y Loja en una próxima vez. Foto: Enrique Pesantes / Familia

4 de marzo de 2022 08:30
Carolina Castillo

El youtuber Lisandro Peñaloza, mejor conocido en el mundo virtual como Falso Nueve, sucumbió a los encantos del Ecuador. Viajó desde Argentina, su país natal, a inicios de noviembre de 2021.

Llegó con unas cuantas valijas suyas y de su novia, pero se fue con una más llena de recuerdos de nuestro país. Uno de ellos es una chuzpa para hacer café, que le regaló su colega ecuatoriano Damián Bernal.

Lisandro muestra el utensilio durante la entrevista para esta nota que nos concede desde el estudio donde graba sus videorreacciones. También le regalaron un majador de plátano verde, porque sus seguidores saben que le encanta hacer el tradicional tigrillo.

Sobre su viaje en nuestro país, cuenta que se quedó fascinado por todo lo que pudo conocer. “Ecuador era más de lo que se puede ver en un video. Quedamos encantados y con muchas ganas de volver”.

Durante su estadía de 15 días en nuestro país fue imposible conversar con él, porque aprovechó cada segundo para conocer lo que más pudo. Estuvo en la Sierra y la Costa.

Si el youtuber comenta que Ecuador le fascinó es porque así pasó. Acostumbra decir las cosas como las siente. Si algo le gusta, los seguidores de su canal en YouTube se enteran y si algo le molesta, también. La sinceridad ante todo es el lema de su canal.

El comienzo

Este argentino de 27 años perdió en 2019 su trabajo en una gasolinera al inicio de la pandemia. No fue lo único. Las restricciones sanitarias también le dejaron sin poder asistir a los partidos de fútbol en los estadios.

Ha sido fanático del balompié toda la vida. Aunque no podía ir al campo de juego, las transmisiones, en algunos casos, sí pudo verlas. Pero sin la emoción de compartir con otros hinchas la pasión y la vibra futbolera no es lo mismo. Algo tenía que hacer.

El desempleo, la nostalgia y la afición crearon a Falso Nueve, un alias que también le da nombre a su canal de YouTube. En esta plataforma sube sobre todo reacciones, es decir, se graba a sí mismo mientras mira videos y eso lo muestra sin filtros. Empezó viendo partidos de fútbol y la hinchada de los equipos de Latinoamérica.

“Me di cuenta de que los argentinos estamos muy errados y pensamos que somos los únicos futboleros en el mundo, pero en Latinomaérica hay mucha pasión”. Por ahí le llegó el pedido de reacción sobre cuál era la mejor hinchada de Ecuador.

Fue un despegue, dice. A esa recomendación se sumaron otras y, en medio, algo inusual: le sugirieron reaccionar a un video sobre las curiosidades de Ecuador. Dudó, pero lo hizo y entonces se enamoró.

Los volcanes, la comida y la megadiversidad que vio en la cinta lo conquistaron. De entrada, el contenido no fue tan bien recibido, pero Lisandro quería saber más, siguió investigando y grabándose mientras lo hacía.

Video: Youtube     Cuenta: Falso Nueve


La conexión

A la fecha, su canal reúne 277 videos de fútbol y de Ecuador. Tiene 81 700 suscriptores. En las cintas se ven las risas, las muecas, el asombro y hasta el brillo en los ojos mientras reacción, por ejemplo a la música de Julio Jaramillo, al encanto de las Islas Galápagos, a la Mitad del Mundo, a los llapingachos, el tigrillo y la gente.

Es amante del chifle y del encebollado. Los preparó en su país aunque, para la sopa de pescado, tuvo que usar atún en lugar de albacora, porque allá no la venden.

Tampoco hay achiote y el verde es carísimo. Además ya se sabe palabras como ñaño, mijines y bacán.

El viaje


Lisandro y su pareja estuvieron en Quito dos días. En el primero fueron al teleférico donde recuerda entre risas que le dio soroche. Al día siguiente fue a la parte colonial.

Las iglesias le parecieron espectaculares. En el Mercado Central logró comer su ansiado llapingacho y se declaró fan del platillo.

Después se dirigió a Guayaquil y de ahí a Montañita. Le gustó la playa, pero prefiere el ambiente menos fiestero. Quiso además hacer la ruta del Spondylus, pero el tiempo no le alcanzó, solo logró conocer Manta. Eso sí, probó al fin el encebollado y confirmó que le fascina.

La belleza de nuestro país le invita a regresar. Quiere visitar Galápagos, por ejemplo. Mientras tanto seguirá siendo un embajador virtual de nuestra cultura a través de YouTube. 

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