Los últimos meses han sido complicados para millones de personas en el mundo. No solo enfrentamos una emergencia sanitaria, los problemas sociales y económicos también han causado un impacto en la salud mental de los individuos.

Cada persona recurre a diferentes métodos para aliviar esta sensación de ansiedad. Algunos optan por la meditación, el deporte, la música, entre otros. Pero una de las formas más curiosas de reducir la ansiedad es con la limpieza del hogar.

Varios estudios han analizado los efectos 'sanadores' de limpiar un espacio para sentirse anímicamente mejor. Darby Saxbe, profesor de psicología de la Universidad del Sur de California, dijo en una entrevista con Vice que "limpiar le da a la gente una sensación de dominio y control sobre su entorno". También agrega que "la vida está llena de incertidumbre y muchas situaciones están fuera de nuestras manos, pero al menos podemos afirmar nuestra voluntad en nuestro espacio vital. El desorden también puede distraer visualmente y servir como un recordatorio persistente de lo que no hemos cumplido".

Marie Kondo, una de las gurús de limpieza más famosas del mundo, explica en su método que la limpieza y la organización van de la mano con la conciencia plena. Para ella, el orden ayuda a despejar la mente y alcanzar un estado de bienestar o felicidad.

Su método tiene soporte científico, ya que varios estudios han mostrado que el desorden puede generar ansiedad. Cuando un espacio está desordenado se producen efectos biológico y neurológicos en las personas. El cortisol, también conocido como la hormona del estrés, puede aparecer cuando una persona se encuentra en un lugar desordenado o sucio.

Pero no es todo, un estudio de la Universidad de Cornell mostró que el estrés causado por el desorden puede llevar a mecanismos poco saludables de lidiar con estas emociones como la comida chatarra, dormir demasiado o no ejercitarse.

Evidentemente la práctica de la organización y la limpieza no causa el mismo efecto relajante en todas las personas. Pero no se pueden negar los efectos positivos de un lugar ordenado para el equilibrio y el bienestar.

A algunas personas que sufren de depresión se les recomienda iniciar un camino de recuperación cumpliendo algunas tareas sencillas pero que requieren mucho esfuerzo de parte de quienes sufren este problema. Arreglar la cama, ducharse, organizar el cuarto son pasos que se pueden traducir en el cerebro como 'tareas cumplidas' que ayudan a activar el sistema de recompensa en el cerebro y, por tanto, dan una sensación de bienestar.