Es normal que el maquillaje se pierda a lo largo del día. Generalmente la mayor intensidad de los tonos y la mayor cobertura dura apenas unas horas después de su aplicación. Esto se debe al sudor, principalmente, pero también a que a lo largo del día es común tocarse el rostro.

Hoy en día el uso de mascarilla también es un factor que puede contribuir a que la duración del maquillaje sea menor. Además, puede dejar marcas en el rostro cuando se utiliza base y polvo y al retirarse la protección quedan áreas con tonalidades diferentes. Natalia Peña, cosmetóloga de Oriflame, explica que una de las recomendaciones es preferir maquillajes ligeros que no sean demasiado cargados. Así la apariencia será más natural y se evitarán las marcas. Ella recomienda algunos pasos para lograr un ‘look’ estilizado por más tiempo.

Durante todo el año es importante mantener una rutina de limpieza e hidratación de la piel. Lo mejor es utilizar cremas hidratantes y acompañarlas de protector solar con FPS+50. La especialista recomienda buscar cremas de textura ligera y de acuerdo con el tipo de piel de cada persona.

Algunas bases líquidas están formuladas para resistir diversos climas y para no transferirse a la ropa ni a los accesorios. Estas bases de larga duración pueden durar hasta 30 horas. Sin embargo, es recomendable dejar respirar al rostro, al menos durante la noche. Para retirarse el maquillaje hay que utilizar limpiadores oleosos y con base de agua para eliminar por completo los residuos.

El polvo es uno de los elementos que se transfiere con facilidad y se pierde rápidamente durante el día. Su función es la de crear un efecto mate y homogéneo en el rostro, pero también con el paso del día pueden solidificarse y crear un efecto de rostro acartonado. Una opción es usar toallitas matificantes que ayudan a controlar el brillo del rostro al eliminar el exceso de grasa.

Para los labios se recomienda utilizar productos de larga duración. Algunos vienen en barra y otros son líquidos y se secan en pocos segundos. Hay que buscar opciones que no resequen los labios y, después de retirar el producto, hay que aplicarse bálsamo para evitar grietas. Asimismo se recomienda hacer una exfoliación con miel y azúcar una vez por semana para cuidar su apariencia.

Las mujeres que tienen jornadas ajetreadas, que sudan mucho o que sienten que su maquillaje se estropea por el uso de mascarilla también tienen la opción de utilizar fijadores. Éstos no solo sellan los productos y evitan que se corran, sino también dan un acabado más profesional al ‘look’ al realzar y emparejar los tonos. Es importante utilizar sprays indicados específicamente para el rostro.