Los patrones familiares se sanan desde la raíz

El trabajo grupal en las sesiones de constelación familiar favorece la aceptación de los conflictos mediante la representación de los integrantes.
Las terapias de constelaciones familiares se realizan durante una hora de forma individual, para conocer el problema. Foto: Pexels

Las terapias de constelaciones familiares se realizan durante una hora de forma individual, para conocer el problema. Foto: Pexels

3 de octubre de 2022 09:40
Darla Arevalo

Las terapias de constelaciones familiares son un método que busca la raíz de conflictos en el hogar, por ejemplo, las malas relaciones entre padres e hijos para resolverlas. Las sesiones evalúan los conflictos que se pasan por
generaciones.

El método fue creado por el psicoterapeuta Bert Hellinger, en 1990. Durante el desarrollo, determinó que las personas tienden a repetir patrones familiares de forma inconsciente, los cuales desencadenan trastornos de ansiedad y depresión. Saleskia, de 52 años, empezó con las terapias para mejorar la relación con su hija y su madre.

Acudió a una sesión para encontrar la raíz de este conflicto. A través de cartas psicoproyectivas representó a su familia y le dio características de personalidad a cada persona.

Según la revisión de cada integrante de la mano de la consteladora, se detectó que la relación entre madre e hija estaba quebrada desde sus antepasados y lo replica ahora.
Sandra Jácome, socióloga y consteladora y quien aplica este método, dice que las relaciones familiares se sanan con el trabajo colectivo.

Las sesiones de sanación convocan a un grupo de personas que representan a los familiares y analizan el conflicto para resolverlo. En medio de la terapia, de 60 minutos, se practica la aceptación del problema y se mencionan frases para sanar. Los resultados se evidencian con la práctica de aceptación y acercamiento con los familiares.

El proceso debe de ir de la mano de un psicólogo para trabajar sobre los trastornos ansiosos y depresivos producto de los conflictos familiares. La psicóloga María Gabriela Escobar explica que la representación de vivencias deja de lado los patrones familiares y se sana desde la raíz.

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