
En situaciones críticas y de conmoción social es indispensable cuidar la salud, especialmente al estar expuestos a gases lacrimógenos. Estos compuestos pueden causar daños y molestias en la nariz, boca y ojos.
Johanna Negrette, oftalmóloga de la Clínica Andes Visión, dice que tras la inhalación de gas lacrimógeno, las personas pueden sentir los síntomas de forma inmediata. Los primeros minutos son los más críticos y las molestias pueden extenderse hasta por unas horas.
Algunos de los síntomas son el enrojecimiento y sequedad ocular, espasmos exagerados de los párpados, lagrimeo, ardor y picazón en los ojos, nariz y piel, dificultad para respirar, tos y sensación de ahogo. Las personas que sufren de asma tienen riesgo de tener más complicaciones por la exposición a estos compuestos.
En caso de que una persona resulte afectada por los gases lacrimógenos, la especialista recomienda tapar las vías respiratorias (boca y nariz) con mascarillas, pañuelos, bufandas, camisas, chompas o cualquier prenda de vestir. Lo ideal es empapar estas prendas con vinagre o limón para retrasar la llegada del gas al organismo.
Otra sugerencia es evitar colocarse paños de agua en la nariz o boca ya que el agua permite la absorción fácil del gas. También recomienda utilizar gafas oscuras con protección UV, colocarse anteojos para resguardarse de cualquier impacto, usar lágrimas naturales para mejorar la lubricación ocular y no frotarse los ojos.
Si las personas tienen dificultad para ver con normalidad es recomendable ir al médico. Asimismo, si las molestias en el tracto respiratorio continúan es conveniente acudir a un especialista.
Te puede interesar